| Polémica

Cuadernos: el empresario Eurnekián analizaría admitir que fue sobornado

El debate se dio en el seno de la Corporación América. Temor a declarar una guerra abierta al Gobierno.

Eurnekian está furioso con el fiscal.

Eurnekian está furioso con el fiscal.

La denuncia por extorsión contra el fiscal Carlos Stornelli, factótum de la causa de las fotocopias de los cuadernos, tuvo repercusiones directas al interior de Corporación América, el conglomerado económico que lidera Eduardo Eurnekián.

CyR pudo conocer que en las últimas horas se desató un fuerte debate en el entorno familiar del empresario porque este quiere confirmar públicamente lo dicho por el abogado Marcelo D´ Alesio en los audios grabados por el empresario rural Pedro Etchebest: que en la causa de los cuadernos lo sobornaron por 600 mil dólares.

«A Eurnekian le sacaron 600 mil dólares para no allanarlo y a las dos horas le allanaron la casa», dice D Alessio en los audios revelados por El Cohete a la Luna. En esa misma saga se habla de otro supuesto soborno de 1.8 millones de dólares que habría pagado Paolo Rocca, dueño de Techint.

Etchebest denunció que el abogado, que se presenta como experto en narcotráfico y agente de la DEA, la agencia antidrogas del gobierno norteamericano, le pidió 500 mil dólares para no quedar detenido en la causa de los cuadernos. Finalmente, se acordó el pago de 300 mil dólares.

El productor rural fue testigos de una reunión en el balneario CR, en Pinamar, entre Stornelli y D´Alessio. Etchebest aguardaba en otra mesa y en un momento fue convocado para saludar el fiscal. Esa sería una suerte de señal para garantizar que el acuerdo para no arrestarlo estaba en marcha.

La explosiva denuncia por extorsión contra el fiscal Stornelli

Lo cierto es que Eurnekián, accionista del Grupo América y dueño de varias concesiones aeroportuarias, querría publicar una solicitada confirmando que fue extorsionado y se quiere sumar como querellante en la causa que lleva el juez federal de Dolores, Alejo Ramos Padilla, dijeron fuentes ligadas al empresario.

Los sobrinos del magnate, que son quienes llevan día a día de la compañía, quieren disuadirlo porque buscan evitar un choque frontal con el Gobierno en una causa que para el oficialismo es clave. Es entendible: hay sobrados intereses creados en los negocios con el Estado que quedarían en jaque si se declarara la guerra abierta contra el fiscal que impulsa la causa más importante para el Gobierno en este año electoral. Le permitirá tener a diario títulos contra la ex presidenta CFK, quien aún no decidió si se presentará como candidata para competir con Mauricio Macri.

El negocio más importante que persigue el Grupo Eurnekian por estos días es la gestión del subte porteño. Una meta ambiciosa en sociedad la francesa Keolis y con apoyo técnico de Transport For London (TFL).  

Pero ni esa premio gordo tal vez alcance. El empresario está furioso, cree que es la oportunidad de lanzarse contra Stornelli como una vendetta por el allanamiento a su domicilio situado en la localidad de Martínez, a fines de diciembre último. A fines de enero, el empresario se presentó a declarar como imputado en la causa, luego de haber sido citado por Bonadio. En la misma causa también declaró Gianfranco, hermano del presidente Macri, también como imputado. En los dos casos, por el supuestos pago de sobornos por los corredores viales.