Por Rafael Saralegui
El secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni, es un mago para las finanzas. En sólo seis años, entre 2007 y 2013, incrementó su patrimonio en un 1009 por ciento, mientras que sus activos en el mismo período tuvieron un crecimiento de un 631 por ciento, de acuerdo con los datos que el mismo presentó en la Oficina Anticorrupción, obligación que alcanza a todos los funcionarios públicos.
Con estos números a la vista, el diputado nacional Manuel Garrido (UCR) denunció a Berni por los supuestos delitos de enriquecimiento ilícito, lavado de dinero y omisión maliciosa en su declaración jurada patrimonial. También pidió que se investigue si en el lavado de activos participó la empresa Logística Integral Río Turbio, de la que formaba parte.
La denuncia de Garrido quedó radicada en el juzgado federal de Luis Rodríguez, quien cómo es de práctica consultó al fiscal en turno para que dictamine sobre la denuncia. El fiscal federal Federico Delgado sostuvo que había elementos para investigar a Berni, pero se excusó de participar en el expediente debido a que él había sido denunciado por el secretario.
Sucede que Delgado se había tomado el trabajo de realizar un estudio sobre la actividad de las comisarías de la ciudad de Buenos Aires cuando se encontraba de turno y su conclusión fue lapidaria. Berni, en lugar de tomar nota de los cuestionamientos, denunció a Delgado por haber obligado a los comisarios a contestar sus pedidos de informes.
Antes de ser elegido diputado nacional, Garrido fue titular de la Fiscalía Nacional de Investigaciones Administrativas, así que algo sabe del análisis de números y declaraciones patrimoniales. El legislador se tomó el trabajo de analizar la presentaciones que hizo Berni ante la OA y encontró numerosas inconsistencias, respecto a sus ingresos, los valores de las propiedades que declara poseer y hasta en las superficies de los terrenos y departamentos que conforman su patrimonio.
En la denuncia, Garrido sostiene que:
Entre el 01/01/2007 y el 31/12/2013 su Activo se incrementó en alrededor del 631 % (más de 5 millones y medio de pesos)
Entre el 01/01/2007 y el 31/12/2013 su Patrimonio se incrementó en alrededor del 1.009,20 % (más de 5,8 millones de pesos)
El Rubro Inmuebles se incrementó en $ 406.600,00 (casi un 50%).
El Rubro Automotores se redujo en $ 4.000,00.
El Rubro Embarcaciones se incrementó en $ 120.000,00 (no existía al inicio y fue adquirida en 2012).
El Rubro Participaciones en Sociedades se incrementó en $ 68.000,00 (no existían al inicio y se redujo de 2012 a 2013 en $ 92.000,00).
El Rubro Créditos se incrementó en $ 313.289,13 (no existían al inicio y sufrió aumentos y disminuciones de magnitud durante los años 2010 a 2013).
El Rubro Cuentas Bancarias y Dinero en Efectivo se incrementó en $ 4.489.200,81 (alrededor de un 28.947%).
El Rubro Deudas disminuyó en $ 297.980,00 (se cancelaron la totalidad de las deudas que existían al inicio).
“Estas abultadas cifras ameritan el estudio exhaustivo respecto del origen y veracidad de los fondos que permitieron al Sr. Berni (según sus propias declaraciones juradas presentadas ante la OA) hacer frente a semejante aumento patrimonial (más de un 1.000%)”, sostiene el legislador. Respecto de las diferencias en las valuaciones y en las superficies de los terrenos e inmuebles que dice poser, Garrido opina que “no debe extrañar que se trate de una maniobra desplegada por el Sr. Berni en pos de dificultar la tarea de los organismos de control con relación al estudio y debida justificación de su enriquecimiento patrimonial”.
La denuncia agrega que durante 2010 Berni declara que adquiere el 80 por ciento de las acciones de la empresa Logística Integral Río Turbio para lo que destina 160 mil pesos. A la misma empresa le da un préstamo de 370 mil pesos en el mismo año, por lo que la inversión total en la firma es de 530 mil pesos. Garrido advierte que “podríamos encontrarnos ante una típica maniobra de las utilizadas para “lavar dinero”, donde en una primera etapa se exteriorizan ingresos sin justificación lícita, luego ese dinero es ingresado en cuentas bancarias, a posteriori derivado a sociedades y por último retornan (ya blanqueados) al patrimonio del investigado”.