| Noticias

Qué hará Julián Álvarez en el Consejo de la Magistratura

La Cámpora llegará formalmente al Consejo de la Magistratura mañana cuando Ricardo Lorenzetti le tome el juramento al diputado Eduardo “Wado” De Pedro y al viceministro de Justicia, Julián Álvarez. Cambiará el mapa de poder el organismo que nombra y remueve jueces: el kirchnerismo podría dejar atrás broncas internas y la oposición lograr la presidencia de una comisión con poder de fuego.

 
De Pedro todavía no visitó sus nuevas oficinas, cosa que sí hizo, y en cuatro ocasiones, el secretario de Justicia. Hasta el momento, Álvarez causa sorpresa: en dos charlas que tuvo con el senador Marcelo Fuentes y con el juez Mario Fera, indicó que su idea en el Consejo es activar la designación de jueces, algo que pide con mucha frecuencia Ricardo Lorenzetti, hasta ahora con poco o nulo éxito.

 
Álvarez se entusiasma con la idea de lograr una administración eficaz y que sea superadora de la de Fera, que en 2013 logró reunir al Consejo menos de diez veces. Promoverá al académico Manuel Urriza como presidente pero acumulará todas las funciones operativas en su despacho. Fuentes le preguntó por el rol que tendría De Pedro. “Será un líder más inspiracional”, fue la respuesta de Álvarez para dar a entender que el diputado podría tener una actuación meramente simbólica ya que lo atañen asuntos de mayor calibre como son las reuniones casi diarias que mantiene en Olivos.

 
La llegada al Consejo le sirve a Álvarez también para desentenderse de la elección para la presidencia del Colegio Público de Abogados de la Capital Federal, donde ya es cantado que el kirchnerismo sufrirá una derrota inevitable. “Ese tema ya se lo pasé a Mariano”, avisa en referencia al presidente de Aerolíneas Argentinas, Recalde.

 
El segundo de Alak tiene como desafío principal la inmersión en ese mundo que desconoce por completo que es el de los jueces (del que no sabe más que de los cafés semanales que mantiene con el camarista de la Casación Penal Alejandro Slokar; y no tiene amigos en ese terreno, sino todo lo contrario). Durante los primeros meses no impulsará acciones contra magistrados sino que se enfocará en reavivar una serie de concursos para cubrir vacantes. En la oposición dudan de esta reciente “buena onda” y señalan que el funcionario intentará imponer jueces cercanos al Gobierno.

 
El primer desafío que le plantearán los opositores pasa por el tema económico ya que Álvarez quiere nombrar un nuevo administrador general del Poder Judicial, alguien más afín al oficialismo y más lejano a la Corte que el actual Germán Krieguer. Es una pelea por la caja que comenzará a definirse mañana por la tarde, en el primer plenario del año.


Compartir: