La Cámara del Crimen confirmó el procesamiento de un ex comisario de la Policía Federal, acusado de «enriquecimiento ilícito», y se investiga si además exigía dinero a «barrabravas» de Boca Juniors para demorar o ignorar pedidos de captura.

La resolución fue firmada por la sala cuarta de la Cámara del Crimen y el procesado es el ex comisario Eduardo Enrique Meta, quien era jefe de la comisaría 24a., cuya jurisdicción abarca el barrio porteño de La Boca.

Los camaristas Carlos Alberto González, Mariano González Palazzo y Alberto Seijas ratificaron el procesamiento del ex comisario Meta, a quien el juez subrogante Rodolfo Cresseri responsabilizó por no haber podido acreditar la licitud de su patrimonio.

“Durante el lapso objetado los únicos ingresos legítimos de Meta procedían de sus remuneraciones como funcionario y docente de la Policía y que no registró deudas significativas según lo informado por las empresas prestatarias de servicios públicos, las oficinas de Rentas, las entidades bancarias con las que operaba y las administraciones de los consorcios que integraba», evaluaron los jueces.

En esa línea, añadieron que «existía un cúmulo de gastos fijos que necesariamente debía afrontar con aquellos ingresos” y ponderaron que «la adquisición de inmuebles y automotores, en la mayoría de los casos sin desprenderse de otros activos ni aplicar reservas … corroboran prima facie que existió un incremento injustificado de su patrimonio”.

En otra causa, Meta está procesado -ante el Tribunal Oral en lo Criminal Once- por haberle cobrado, presuntamente, al barrabrava de Boca Richard William Laluz Fernández, alias “Uruguayo Richard”, para omitir un pedido de captura que tenía pendiente desde hacía unos dos años.

El 23 de marzo de 2008, previo a un partido entre Boca y Colón de Santa Fe en La Bombonera, Richard fue detenido y subido a un móvil policial que lo trasladó a la Comisaría 24, tal como quedó registrado en las filmaciones de las cámaras de seguridad del club xeneize.

Sin embargo, los investigadores determinaron que su arresto nunca quedó registrado en la sede policial por entonces a cargo de Meta.