La Justicia y la Policía Federal allanaban esta mañana el estadio de Vélez Sarsfield en busca de los videos del día del crimen del hincha Diego Bogado que, según se constató en la causa, nunca fueron entregados por el club y fueron borrados del sistema.
Fuentes de la investigación informaron hoy que el allanamiento en el estadio José Amalfitani, en el barrio porteño de Liniers, era encabezado por la fiscal de instrucción a cargo de la causa, Graciela Gils Carbó y la División Homicidios de la Policía Federal.
Los voceros indicaron que el objetivo de la diligencia es tratar de encontrar en el club alguna copia de los videos de las cámaras de seguridad de la noche del 9 de abril, cuando Vélez jugó con Emelec por la Copa Libertadores y al día siguiente fue hallado el cadáver de Bogado en el sector de la herrería.
«Los videos de las cámaras que apuntan al sector de la herrería están borrados. Vélez tendría que haber entregado una copia al Ministerio de Seguridad tras el partido y nunca lo hizo y cuando en una allanamiento revisamos el CPU donde queda el backup, determinamos que las imágenes de esas cámaras estaban borradas», dijo a Télam uno de los investigadores.
La misma fuente señaló que con el allanamiento de hoy, el propósito de la fiscal Gils Carbó es intentar encontrar alguna copia de esos videos.
El propio padre de la víctima, Héctor Bogado, denunció hoy el faltante de esos videos. «El video que está faltando es del sector de herrería. Yo tengo entendido que son los de los sectores 21, 22 y 23. Esos son los videos clave que van a demostrar lo que ha pasado y que a mi hijo lo han trasladado sin vida hasta ahí», dijo Bogado al canal C5N.
Además, especuló con que el crimen de su hijo -quien según la familia integraba la facción conocida como «La Pandilla de Liniers»-, está vinculado a algún problema de la barra brava.»Por qué lo mataron no sé, pero está dentro de ese entorno», dijo al respecto.
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