El juez de instrucción Pablo Ormaechea ordenó el arresto de cuatro sospechosos, en la causa por el homicidio del periodista partidario Nicolás Pacheco, quien apareció muerto en la sede de Racing Club en Villa del Parque el 24 de enero último.

Las fuentes judiciales que informaron del pedido no dieron a conocer las identidades de los buscados «para no frustrar el objeto de la medida» y dijeron que la mayoría de las órdenes de captura comenzarán a practicarse en domicilios en el conurbano bonaerense.

Las capturas fueron dictadas a pedido del fiscal Marcelo Retes, quien investiga el hecho registrado el 24 de enero último, cuando Pacheco, de 32 años, fue hallado muerto en la piscina de la sede social ubicada en Nogoyá al 3.000.

Esa mañana, cuando el personal de SAME llegó al lugar, a las 6.45, Pacheco llevaba varias horas muerto, de acuerdo con lo señalado por Alberto Crescenti, titular del servicio de emergencias de la Ciudad.

Además de periodista partidario del club, Pacheco era locutor y productor del programa «Racing o nada» y había protagonizado un corto cinematográfico llamado «Gracias a mi viejo», en el que se hacía referencia a su pasión por el club de Avellaneda.

Para el fiscal el periodista fue asesinado en una pelea, ya que en la autopsia se acreditó que tenía lesiones compatibles con una paliza y no con una caída accidental a la pileta.

Fuentes de la pesquisa informaron que la  causa de muerte de Pacheco fue una fractura de cráneo, mientras que presenta costillas fracturadas y no tenía agua en los pulmones, lo que indica que entró muerto a la pileta.

Para el fiscal Retes también es clave en la causa la declaración de una vecina que vivía en un departamento de uno de los edificios contiguos a la pileta y que aquella madrugada del 24 de enero escuchó gritos, una discusión, una pelea y después el estampido de algo que caía al agua.

Por todo ello, Retes tiene en la mira al menos cuatro de las personas que aquella noche participaron junto a Pacheco de un asado en las parrillas del predio que se prolongó hasta la madrugada, cuyas capturas requirió al juez.