| Por enriquecimiento ilícito

Sigue la pelea judicial con el Gobierno: ratifican la denuncia contra el juez Bonadio

Lo hizo el senador kirchnerista Fuentes. Es porque el juez no declaró que tiene parte de una estación de servicio. Las actividades comerciales están prohibidas a los jueces.

Los jueces federales Lijo, Bonadio y Ercolini.

Los jueces federales Lijo, Bonadio y Ercolini.

El senador nacional del Frente para la Victoria Marcelo Fuentes ratificó ante la justicia su denuncia por presunto enriquecimiento ilícito y lavado de dinero contra el juez federal Claudio Bonadio.

Lo hizo por escrito ante el juez federal Julián Ercolini, en donde ratificó su denuncia contra el titular del juzgado criminal y correccional federal 11 de la Capital, luego de que se conociera que integra junto a su hermano una empresa de combustibles.

En su escrito, el senador kirchnerista y ex integrante del Consejo de la Magistratura reiteró que Bonadio «no podría formar parte de la sociedad respectiva toda vez que el reglamento para la justicia nacional no le permite a los magistrados ejercer el comercio o actividad lucrativa alguna” sin autorización de la autoridad de superintendencia, en este caso la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional Federal.

“De acuerdo a las noticias que tomaron estado público, la firma en la que es accionista Bonadio no habría presentado ante la Inspección General de Justicia los balances correspondientes a los años 2011 y 2012, y que al desconocerse por ende el estado financiero de la empresa, tampoco resulta posible efectuar un certero y completo análisis de la evolución patrimonial del magistrado», sostuvo Fuentes en su denuncia.

La participación del juez en una firma comercial junto a su hermano fue revelada por la presidenta Cristina Fernández de Kichner luego de que éste ordenara allanar la administradora de un hotel de la familia Kirchner basado en una denuncia por una supuesta irregularidad tributaria.

La empresa de los Bonadio es Mansue S.A., dedicada a la venta de combustibles, que según los datos registrados pertenece en un 40 por ciento a Carlos Alberto Bonadio, mientras que su hermano magistrado poseería un 20 por ciento.

El resto de la composición accionaria estaría en manos de los hermanos Fernando y Alejandro Climent, con un 20 por ciento cada uno.

Ahora, Ercolini correrá vista al fiscal federal Eduardo Taiano, para que determine si corresponde abrir o no una investigación penal contra el titular del juzgado federal 11.


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