Alejandro Slokar, uno de los principales referentes de Justicia Legítima, se quedó con las ganas de asumir la presidencia de la Cámara Nacional de Casación Penal. Slokar es un discípulo del renunciante juez de la Corte Eugenio Raúl Zaffaroni y es el más cercano ideológicamente al gobierno. La nueva presidencia de Casación quedó en manos de Ana María Figueroa por los votos del actual presidente de la Cámara, Mariano Borinsky y de los camaristas Luis María Cabral, Gustavo Hornos, Eduardo Riggi y Liliana Catucci. Slokar, Angela Ledesma, Juan Carlos Gemignani y Pedro David se abstuvieron de votar. Ellos sostenían que existe una acordada que establece que por tradición es el vicepresidente el que asume el rol de titular, por lo que hubiera sido el turno de Slokar.