| Lo calificó de "carancho judicial"

De cómo Bonadío se convirtió en el juez más odiado por Cristina

El histórico juez federal se convirtió en una pesadilla para el kirchnerismo con las causas en su poder. Cavallo dijo que era un juez de «la servilleta». Nuevo alineamiento.

Bonadio, la pesadilla del Gobierno.

Bonadio, la pesadilla del Gobierno.

Por Rafael Saralegui

Hombre de armas tomar, el juez federal Claudio Bonadío se convirtió en el centro de la ira presidencial, quien lo calificó ayer de “carancho judicial”. Así el magistrado pasó de ser uno de los integrantes de la famosa lista de jueces de la servilleta de Domingo Cavallo (metáfora que Mingo usó para denominar a los jueces que estaban al servicio del menemismo) a uno de los que más molesta e inquieta a quienes se encuentran en la cúspide del poder en la Argentina.

Ya tiene casi listo el cierre de la causa para enjuiciar al vicepresidente Amado Boudou por los papeles truchos de un viejo coche y ahora se refriega las manos con el expediente que le sirvió la diputada Margarita Stolbizer por supuestas irregularidades en la sociedad que maneja los hoteles de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.

Cristina Kirchner usó su cuenta de twitter para decir que Bonadio es integrante de una empresa que se encuentra en las mismas condiciones que Hotesur SA, que fue allanada por el magistrado la semana pasada. “¿Algún legislador o legisladora denunciará? ¿Algún juez allanará? ¿Qué dirá la prensa independiente?”, se preguntó la mandataria. “Se ve que se trata de una sociedad de familia. ¿Y sabés qué? Deben los balances por ejercicios cerrados al 21/12 de 2012 y al 31/12 de 2013”, agregó.

Los choques entre Bonadío y el kirchnerismo no son nuevos. Ya en marzo pasado el Consejo de la Magistratura decidió hoy impulsar una investigación en su contra, mientras que casi al mismo tiempo el magistrado decidía elevar a juicio oral una causa contra el ex secretario de Comercio Guillermo Moreno.

Bonadío decidió entonces cerrar el sumario contra el ex secretario de Comercio acusado de abuso de autoridad como consecuencia de la multa que impuso a la consultora Finsoport, de Jorge Todesca, a raíz de medir en forma paralela los índices de precios al consumidor que realizaba el Indec.

También en marzo se inició además el juicio oral por la tragedia de Once, investigación que llevó adelante Bonadío y que concluyó con 29 imputados, entre los que se encuentran los ex secretarios de Transporte Ricardo Jaime y Juan Pablo Schiavi, que están en los mismos bancos de los acusados que ocupa la familia Cirigliano, beneficiaria de millonarios subsidios durante años.

Bonadío tiene una acusación por mal desempeño ante la Comisión de Disciplina y Acusación del Consejo de la Magistratura, pero difícilmente el jury en su contra pueda prosperar porque el kirchnerismo no cuenta en el cuerpo con los votos necesarios para removerlo.

Necesita nueve votos y para llegar a ese número debería contar con el apoyo de los legisladores de la oposición, de los abogados o de los jueces Cabral o Moldes, que difícilmente votarían en contra de un colega, que además tiene en sus manos varias causas políticas.

En el kirchenerismo dicen que Bonadío “opera” con estas causas en favor de Massa. Que antes se alineó con Miguel Angel Toma, luego con Juango Alvarez y que ahora milita con el ex intendente de Tigre. Sin embargo, los expedientes que instruyó el juez contra Boudou por los papeles truchos, contra Jaime y Schiavi por la tragedia de Once, y contra Moreno, tuvieron el respaldo de la Cámara Federal.

 


Compartir: 
Etiquetas:  ,