| Proyecto al Congreso

El nuevo Código Procesal Penal prevé la expulsión de extranjeros (sorprendidos en flagrante delito)

El Gobierno enviará hoy al Parlamento el proyecto del nuevo código que otorga mayor poder a los fiscales. Acorta los plazos y contempla reincidencia, criticada por Zaffaroni.

Cristina hizo el anuncio por cadena nacional.

Cristina hizo el anuncio por cadena nacional.

“Estamos enviando un instrumento de procedimiento ágil, moderno, demandado por jueces, por la academia y por la propia realidad, donde la sociedad se siente desprotegida”, señaló la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en su discurso por cadena nacional al anunciar el envío al Congreso de un proyecto para adoptar un nuevo Código Procesal Penal.

El nuevo sistema prevé que todo el proceso sea oral y público, que los juicios sean más cortos, que la investigación esté cargo de los fiscales, que se pueda expulsar a los extranjeros en caso de ser sorprendidos en delitos flagrantes y se contempla la prisión preventiva para casos de «conmoción social».

En un mensaje grabado, la Presidenta apeló a que “mañana (por hoy) tome estado parlamentario esto a lo que nos habíamos comprometido: darles instrumentos eficientes no sólo a los jueces y a los fiscales, que son el medio. El objetivo final es el ciudadano. Que el ciudadano tenga certezas de que hay instrumentos que lo protegen”.

La Presidenta apuntó directamente sobre los reclamos por la falta de celeridad en los procesos judiciales y aclaró que “el que cree que solamente con las armas de matar se soluciona el delito, está totalmente equivocado. Se requiere que los que tienen la obligación de investigar y de juzgar actúen con celeridad”.

En ese sentido, mencionó que juristas, víctimas de delitos y toda la sociedad «desde hace mucho tiempo piden reformas y cambios».

A diferencia del Código Levene que rige hasta el momento, la Presidenta indicó que «estamos instalando un sistema acusatorio que delega en el fiscal la acusación» y destacó que «la novedad es que las víctimas no serán meros querellantes sino que podrán participar en el proceso».

Al respecto, dijo que la investigación deberá tener un plazo de un año y el juicio oral iniciarse entre 5 y 30 días después de terminada la investigación.

La causa no prescribe y si el juez y los fiscales no cumplen con los plazos van a tener sanciones graves como llegar al jury de enjuiciamiento, detalló.

En ese sentido, señaló que ya no será cómo ocurre en la actualidad que «cuando no pasa nada en un juicio, no les pasa nada ni al juez ni al fiscal».

Además, explicó que en ningún caso el vencimiento de los plazos genera la extinción de la pena.

“Si un ciudadano se siente desprotegido por el mal desempeño de un juez o un fiscal, tendrá con este nuevo Código elementos para recusarlos”, señaló la jefa de Estado.

En cuanto a la llamada «puerta giratoria» por la cual «los delincuentes entran por una puerta y salen por otra» el nuevo código establece la prisión preventiva en base a la naturaleza, circunstancia del hecho y la conmoción social que generó, y que además se tendrá en cuenta la reincidencia del autor.

La Presidenta también se refirió a una figura que «puede generar controversia», al indicar que el nuevo código contempla la expulsión de extranjeros que estén en situación irregular en el país y sean sorprendidos in fraganti en el delito. En estos casos, serán expulsados y no podrán retornar por un lapso de 15 años.
Durante el mensaje que brindó desde su despacho en la Casa Rosada, la mandataria anunció además que el proyecto enviado prevé la conformación de una Comisión Bicameral para que se ocupe del monitoreo de la aplicación del nuevo Código.

Además destacó que está previsto que, de ser aprobado, el nuevo Código se aplicará solo en las causas penales que se inicien luego de su sanción e implementación.

«Este código va a significar un avance fundamental en el combate contra el delito», afirmó Cristina.

«Esta ley que estamos enviando, en definitiva, es un instrumento de procedimiento ágil, moderno, demandado por la realidad que nos impone hoy un procedimiento gravoso y lento por el cual la sociedad se siente desprotegida», agregó.

Sostuvo que «el objetivo final es que el ciudadano tenga la certeza de que habrá instrumentos legales que lo protejan y que puedan reclamarle al juez y a los fiscales que actúen como es debido».

«Debemos actuar con celeridad», afirmó Cristina y sostuvo que «la demanda de justicia, de reparación, no tiene colores políticos» por lo que apeló a que «todos los componentes del parlamento» traten con «celeridad y responsabilidad» el proyecto de Código Procesal Penal.

La Presidenta insistió en dotar a la sociedad de un «arma legal» para protegerla de delito, y sentenció: «Quienes creen que con las armas de disparar se soluciona el problema del delito, están equivocados».