| Televisión de plasma y celular

Por los privilegios de Grassi relevan al jefe de la cárcel de Campana

El jefe de la cárcel fue desplazado luego de que un informe de canal 13 mostrara los beneficios que recibe el cura condenado por abuso sexual de menores.

Grassi está preso desde octubre de 2013.

Grassi está preso desde octubre de 2013.

El gobierno bonaerense resolvió hoy separar del cargo al titular de la Unidad Penitenciaria 41 de Campana, Raúl Garnica, tras la denuncia por el presunto desvío de donaciones de la Fundación Felices los Niños al penal donde se encuentra alojado el cura Julio César Grassi, donde cumple condena por abuso sexual.

La medida la adoptó  la titular del Servicio Penitenciario, Florencia Piermarini, quien resolvió “separar en forma preventiva” al jefe de la unidad con el objetivo de “garantizar la transparencia en la investigación interna que inició el Servicio Penitenciario”, se informó oficialmente, según la agencia de noticias Télam.

Además se consignó que hasta que mañana se defina al nuevo titular de la Unidad 41, la misma quedará a cargo del responsable del Complejo que componen las cárceles de Campana, Ramón Duarte.

Más temprano, la jefa del Servicio Penitenciario Bonaerense le había pedido hoy informes al responsable de la Unidad de Campana sobre el caso Grassi y había anunciado que tomaría medidas el marco de un sumario administrativo.

«Hoy hubo una entrevista con el director de la unidad de Campana y se le remarcó si había alguna constancia de este tipo de donaciones. Está en un proceso de sumario en Asuntos Internos del Ministerio de Justicia», había dicho la jefa del SPB al canal de noticias TN, luego de que se decidiera intervenir la “Fundación Felices los Niños” desde la gobernación Bonaerense.
Según un informe de canal 13 Grassi gozaba de privilegios en la cárcel, como un televisor de plasma, teléfono celular y se le permitía utilizar una oficina del penal para realizar diversas reuniones.

Este es el segundo desplazamiento en seis meses. En enero, la dirección fue obligada a renunciar por un secuestro de 69 facas y 50 celulares. El episodio fue después que un grupo de presos hiciera ostentación de armas caseras en la red de facebook.


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