Campagnoli había sido supendido en diciembre.

El fiscal de instrucción José María Campagnoli volvió esta mañana al trabajo en la fiscalía de Saavedra, tras más de siete meses de suspensión, y ratificó que «no» cometió «ningún error» al investigar «de oficio» al empresario kirchnerista Lázaro Báez.

Campagnoli retomó sus funciones luego de que el Tribunal de Enjuiciamiento dejara sin efecto la semana pasada la suspensión que pesaba contra él por presunto mal desempeño al resolver el jueves, por 4 votos contra 3, levantar la suspensión decretada en diciembre.

«Veré con qué me encuentro, pasaron más de siete meses», dijo el fiscal al llegar a la sede de Arias 4491, ya que debe analizar «qué personal quedó y qué oficinas» puede disponer, aunque ya reclamó que le reintegren su cuerpo de «once colaboradores».

En declaraciones a la prensa, Campagnoli insistió: «No incurrí en ningún error» al investigar a Báez y consideró su suspensión, que ahora quedó sin efecto, como «un intento de disciplinar a los fiscales y amedrentarlos para que no continúen con las investigaciones».

El tribunal de enjuiciamiento resolvió la semana pasada levantar la suspensión de Campagnoli y volver a reunirse en agosto para resolver cómo sigue el jury de enjuiciamiento al fiscal, acusado de deesviar el objeto procesal de una causa para invesitigar al empresario Lázaro Báez.

El proceso se empantanó cuando renunció la integrante del jury en representación de los defensores oficiales. El jury había entrado en la etapa de definición, ya que sólo faltaban los alegatos para que el tribunal resolviera. María Cristina Martínez Córdoba renunció después de haber sido hostigada en las redes sociales.

También fueron hostigados y amenazados los dos fiscales que impulsaron la acusación contra Campagnoli y el presidente del tribunal de enjuiciamiento, Daniel Adler, lo que provocó el repudio del resto de los integrantes del tribunal.